30 de enero de 1933: Discurso del Führer con motivo de la toma de la cancillería tras la victoria electoral.
Compatriotas alemanes... el 30 de enero se formó un nuevo gobierno nacional. Yo, y conmigo elmovimiento nacionalsocialista nos hemos incorporado a él. Siento, que el objetivo por el que tanto he luchado en los años pasados ha sido alcanzado.
Cuando terminó la guerra en 1918, yo era igual que muchos millones de otros alemanes, no responsable de las causas de la guerra, no responsable de la conducción de la guerra, y no responsable de la situación política de Alemania. Yo solo era un soldado entre otros ocho o diez millones de otros soldados.
Hubo un tiempo en el que un alemán solo podía estar orgulloso del pasado; cuando el presente causaba vergüenza. Con el declive de la política extranjera y la decadencia del poder político comenzó el derrumbamiento interno, la disolución de nuestras grandes organizaciones nacionales, y la decadencia y corrupción de nuestra administración. ¡Y así comenzó el declive de nuestra nación! Todo esto fue causado por los hombres de noviembre de 1918.
Y ahora vemos cómo se derrumban clase tras clase. Las clases medias están desesperadas, centenares de miles de vidas están arruinadas, año tras año la situación se hace más desesperada. Decenas de miles se declaran en quiebra, y ahora el ejército de los desempleados comienza a engrosarse...uno, dos, tres millones... cuatro millones... cinco millones... seis millones... siete millones... Si, hoy en día podría ser de siete a ocho millones.
¿Cuánto tiempo puede continuar esto? Estoy convencido de que debemos actuar ahora si no queremos llegar demasiado tarde. Por consiguiente, he decidido, el 30 de enero, utilizar a mi Partido, antaño de siete hombres y ahora de doce millones, para salvar a la nación...y a la patria.
Tal y como yo trabajé durante catorce años para construir este movimiento y hacerlo crecer desde siete hombres a doce millones, ¡así trabajaré!, ¡así trabajaremos todos, para la resurrección de la nación alemana! Pueblo de Alemania: dadnos cuatro años, y juro que del mismo modo que he ocupado el poder, también lo abandonaré. ¡No lo he hecho buscando una recompensa! ¡Lo he hecho por vosotros!
ADOLF HITLER